Txindoki y Urederra

El sábado madrugamos un montón. A Talan le metieron en el maletero del autobús dentro de una caja. En la subida al nacedero del Urederra nos encontramos con mucha gente, sobre todo niños, y vimos una laguna de color azul turquesa.

Todos los ojancos dormimos en una habitación gigante, y el domingo subimos al Txindoki.

En la bajada se puso a llover, y llegamos a un refugio que estaba cerrado, y como tenía frío y estaba mojado me enfadé y dije: “Vaya mierda de refugio”, pero me lo pasé muy bien.

En el viaje de vuelta escuchamos por la radio del autobús dos partidos de futbol: el de España frente a Italia, que fue empate y el del Valladolid contra el Córdoba por el ascenso. 

Sergio

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